Alto impacto: la nueva generación de emprendedores.
¿EL EMPRENDEDOR NACE, SE HACE O SE ENCUENTRA? LOS EMPRENDEDORES SON HOMBRES Y MUJERES QUE JAMÁS DEJAN DE INNOVAR, SON CREATIVOS, DINÁMICOS, TOMAN RIESGOS, A VECES ROMPEN REGLAS Y TIENEN MENTALIDAD GANADORA. SON COMO SUPERHÉROES QUE VAN MÁS ALLÁ DE LOS LÍMITES
Por Lourdes Flores.
El emprendimiento de alto impacto, es como un arte marcial, es riesgoso y enseña a dominar la mente, sin embargo, para tener éxito se debe ser perseverante, constante, paciente, y jamás quedarse en la zona de confort. Hoy se requiere formar a emprendedores centrados en la innovación y capaces de generar un impacto económico para su empresa y la comunidad en la que se desempeñan, debido a que la economía mundial crece a muy bajo ritmo, mientras que la oferta laboral de jóvenes egresados de las universidades supera por mucho a la demanda de empleos formales. En México, surgen emprendedores sobre todo en épocas de crisis. Expertos en emprendimiento creen que es necesario romper paradigmas y realizar un profundo cambio cultural en la sociedad a partir de la educación, para generar emprendedores de alto impacto. “Los emprendedores de hoy son la base de la economía del mañana”, dijo, Bill McDermott, Co-CEO de la compañía de software de aplicaciones de negocio, SAP. Justo con el objetivo de que los jóvenes de educación superior, se “conecten” con jóvenes emprendedores que se caracterizan por su innovación, generación de riqueza y enfoque social, la Asociación de Jóvenes & Empresarios en conjunto con el Instituto Estatal de la Juventud de Nuevo León, organizaron el Congreso Internacional de Emprendimiento y Liderazgo (Emprendus), que se realizó el 4 y 5 de octubre, en el Centro de Congresos Cintermex, en la ciudad de Monterrey.
¿QUIÉN DIJO QUE SER EMPRENDEDOR ERA FÁCIL
Uno de los conferencistas invitados, fue el uruguayo Maxi-miliano Del Muro. Actualmente es inversionista ángel y socio representante en Brasil y Latinoamérica de MOLA, una acele-radora de negocios que invierte fondos de Europa en empresas de Latinoamérica.No todo fue miel sobre hojuelas. En 2000 fundó Infranet-working, una empresa con la que le fue muy mal. Dijo que la lección fue que en el camino del emprendimiento hay fracasos, “pero hay que volver a levantarse”.Entre 2002 y 2003 fundó dos compañías. La primera, Media-Gambling, una red con 300 sitios de apuestas en línea y más de medio millón de visitas al mes, la cual vendió a CMedia en 2009. En 2003 abrió SX Networks, una firma de servicios de software, con la que obtuvo ingresos por más de un millón de euros anuales.Del Muro opinó que no existe el Emprendedor Omnipo-tente, indestructible como si fuera Superman. Perder la humildad, es el peor error de las personas. Por eso, “cabeza en el cielo, pies en la tierra”.
VENDIENDO ALGO INTANGIBLE, QUE SE CONVIERTE EN VALOR
El mexicano Fernando Luege, fundó Ondore a los 18 años. Una firma tecnológica que procesa y analiza información en tiempo real de sitios web, blogs y redes sociales mediante un algoritmo de análisis y Big Data, permite descubrir qué están diciendo los clientes de una marca en la web.A los 21 años patentó en Estados Unidos un algoritmo para la clasificación y el ordenamiento automático de información.Recomendó a los jóvenes que nunca se den por satis-fechos, “Steve Jobs de Apple, jamás dejó de innovar. Cuando inicias una empresa es como si manejaras un Ferrari, hay pocas personas y se puede ir a gran velocidad, pero conforme se especializa, es como si viajaras en un barco carguero y no se puede virar a medio camino”.En 2013, Ondore recibió una inversión por 1.5 millo-nes de dólares de la empresa de fondos Alta Ventures México. Con esta inversión podrá expandir su marke-ting y ventas y desarrollar nuevos productos. “Cedes una parte de la empresa a gente que está creyendo en tu producto”, indicó Luege.Luege, reconocido como uno de los emprendedores más innovadores, empezó su negocio con dos amigos de la prepa, “vendiendo cosas que no existían”, así hizo su presentación de ventas y logró un contrato, después abrió Ondore y hoy tiene un equipo de 40 personas en México y en San Francisco, California.
EL EMPRENDIMIENTO, COMO SALTAR EN PARACAÍDAS
Duane Spires, nació en Ohio y creció en Tampa, Flo-rida, Estados Unidos. Cuando asistía a la Universidad no tenía un centavo y comenzó a dar clases de artes marciales, pero vio una oportunidad de abrir centros para ofrecer programas después de clases.Es fundador de Extreme Youth Sports Inc., una com-pañía que ofrece clases de Karate, Baile, Tenis, Fitness y clases para porristas y campamentos. Los centros tuvieron gran éxito y pronto logró abrir 50 centros alrededor de Tampa, Florida.“Antes de la crisis económica mundial era fácil hacer dinero, me confié y dejé de trabajar duro. Cuando cayó la economía en 2008, no había dinero para pagar clases o campamentos y perdí mucho. Eso me enseñó a tomar decisiones”, dijo Duane.Hoy, su empresa posee centros de entrenamiento en varios estados de la Unión Americana, y obtiene ingresos anuales por más de un millón de dólares. Además, Duane se dedica a dar conferencias en varios países, para motivar a jóvenes a emprender, a romper sus barreras y desaparecer el miedo.
Emprender es como estar parado en el borde de un avión, cuando estás a pun-to de saltar, tienes miedo y te preguntas qué pasaría si no se abre el paracaídas; el que está junto a ti piensa lo mismo. Sin embargo, tú te lanzas y el otro se queda en el borde; eso hace un emprendedor, se lanza con ando en que tendrá éxito
Durante el evento, se presentaron otros emprendedores exitosos de México, Estados Unidos y Dinamarca, quienes invitaron a los jóvenes a seguir la ruta de la innovación: tener una meta, analizar la distancia e implicaciones, no dar excusas, ofrecer soluciones; prever eventualidades y tener un plan de acción.Uno de ellos citó al ex gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, quien emprendió en su propia vida siguiendo estos principios:
“Cree en ti; rompe algunas reglas; no temas si fracasas; ignora a los negativos”. Tú decides, quieres ser espectador de tu propia vida o actor de tu propio emprendimiento